jueves, 14 de julio de 2011

Cómo cambiar la plantilla a unos zapatos. Cuidado de zapatos

Siento tantos días de ausencia, pero realmente necesitaba unos días de descanso. Vuelvo con un post que tengo pendiente desde hace mucho tiempo pero que por diversas causas, no he podido terminar hasta ahora. Una de las mejores cosas que me ha aportado el blog ha sido o más bien es, conocer a profesionales del sector de los zapatos. Gente amable y dispuesta a resolver dudas y echar una mano en cualquier cosa. Una de esas personas, me dio hace tiempo algunos trucos muy útiles para "tunear" unos zapatos y hoy quiero compartirlo con vosotras.

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Las víctimas de este experimento, han sido estas sandalias de Zara que es posible que recordéis. Las compre en un arrebato rebajil y es que por 10€ quién puede resistirse. El asunto es que la plantilla de la sandalia es de tela y para unas horitas no pasa nada, pero después de todo el día terminan siendo muy molestas.


Tanto rollo para contaros COMO CAMBIAR LA PLANTILLA A UNOS ZAPATOS.

Necesitamos:

- Las sandalias

- Plantillas de piel 
o
- Trozo de piel para recortar la plantilla, lámina fina de corcho (para acolchar la planta debajo de la plantilla) y un trozo de lija de grano fino.

- Pegamento de contacto a ser posible de color transparente

- Papel y lápiz.

- Un poco de paciencia y posiblemente un par de horas


Mis compras:

-El pegamento lo compré en unos chinos. Costó unos 2€ los dos tubos, uno de ellos de color transparente y el otro amarillento.
-El corcho lo compré en Leroy Merlin. Un rollo tipo forro para libros, con adhesivo por uno de los lados. Me costó unos 8€ y me va a servir para muchos zapatos.
-De piel utilicé un trozo que tenía en casa de una prenda vieja.


-En caso de que no tengáis un trozo de piel, podéis comprar una de esas plantillas de piel que venden también en los chinos por 1 o 2€. La plantilla de la imagen siguiente tiene una capa inferior para amortiguar que podemos despegar con cuidado y sustituir por una capa de corcho si lo preferimos.


PASOS A SEGUIR:

Lo primero es quitar la plantilla original tirando sin miedo. Lo despegamos con cuidado por un lado y tiramos suavemente. Por lo general, la plantilla lleva en el borde una costura "falsa" y sólo está pegada por lo que podemos retirarla facilmente. Como se aprecia en la imagen, debajo de la plantilla, la sandalia tiene una capa de goma que también he retirado.


Posteriormente debemos dibujar la nueva plantilla sobre el trozo de piel o la plantilla. Como modelo utilizaremos la plantilla que hemos retirado. Yo hice la plantilla primero en papel y luego en la piel. Es muy importante que la plantilla nueva tenga exactamente la misma forma que la original, en caso contrario, no quedará bien.

Si utilizamos una plantilla con material amortiguador, nos saltamos los pasos siguientes. En caso de que vayamos a utilizar el corcho, recortaremos de la misma forma una plantilla para posteriormente pegarla bajo la plantilla de piel. Para que se pegue con facilidad, podemos utilizar una lija de grano fino sobre la superficie inferior de la piel.


Para terminar, pegaremos plantilla sobre la sandalia y voilá..... Bricolaje terminado.

¿Tenéis alguna sandalia que os molesta la plantilla? ¿os atreveréis a probar esta solución? Si os animáis espero que nos contéis como ha ido el experimento y compartáis alguno de los problemas que os ha podido surgir.

Si tenéis alguna duda, por supuesto ¡¡preguntad!!

Perdón a todos los profesionales del sector por las posibles patadas al mundillo por algún posible error por mi parte.

Fuente: http://adictaaloszapatos.blogspot.com/

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